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Una visita inesperada para la época

Van Halen en Argentina: la bomba atómica que cayó sobre Obras


Antes que nada, pondremos al lector en contexto de lo que era Argentina en esa época. Estábamos en la culminación de una dictadura militar que marcó a toda la población y a una generación en especial (en ese 1983 habría elecciones y en diciembre Raúl Alfonsín asumiría la presidencia iniciando el ciclo democrático), y aún estaba fresco el recuerdo de La Guerra de Malvinas (1982). El de Van Halen en Obras sería el primer show importante de posguerra y el clima que se vivía en la sociedad era bastante tenso. El único antecedente de una visita súper importante era la de Queen en 1981. Ese fue el primer show internacional masivo en serio y que tuvo gran difusión en diarios y TV. Ya habían pasado dos años de esto y por obra del destino o vaya a saber de quién, los días 11 y 12 de febrero de 1983 aterrizó Van Halen en Buenos Aires. La banda venía desarrollando una gira por Sudamérica que incluyó a Venezuela, Brasil, Uruguay y, como punto culminante, nuestro país. Antes de los shows en "El Templo", nos enteramos que la banda había suspendido 5 shows que debía hacer en Inglaterra luego de los Obras, ya que habían decidido parar para comenzar a grabar nuevo material. Dichos conciertos se habían reprogramado para los meses de septiembre u octubre. Por ende, los shows en Argentina serían los de final de gira, con todo lo que ello implicaba. Siguiendo con las consideraciones, la banda llegaba al país con 5 discos editados desde 1978 y con uno más reciente: "Diver Down". En él habían incluido varios covers (Roy Orbison, Marvin Gaye, Ray Davis) y lo estaban presentando en gira. El grupo estaba considerado como uno de los mejores shows en vivo que había dentro del rock pesado y heavy metal, y lideraba los charts mundiales. Tenía en David Lee Roth un increíble frontman con cualidades artísticas e histriónicas inusuales para la escena de ese tiempo, más al guitarrista que destrozó todos los libros y las técnicas que se conocían hasta ese momento: Eddie Van Halen. Conocido por su técnica llamada tapping, este "monstruo" de la viola sorprendió al mundo con su bagaje técnico. Además, Alex Van Halen en batería y Michael Anthony en bajo, conformaban un tándem rítmico granítico imposible de igualar para la época. Considerando todo lo expuesto, más la conmoción lógica de una visita de lujo, pasaremos a rememorar y analizar lo que se vivió en Obras y lo que fue el vendaval Van Halen en Argentina.



LOS SHOWS EN VIVO: UNA LOCURA SÓNICA INCREÍBLE

Van Halen en Argentina concitó a todas las tribus de rock pesado y heavy de Capital y Gran Buenos Aires. Ya dijimos que fue un evento muy particular debido a los pocos recitales internacionales que se hacían en esos años y, por ende, todo el mundo quería estar ahí. Muchos músicos de la escena se hicieron presentes en Obras y así se pudo ver a Adrián y Ronan Bar, Ricardo Soulé, Rodolfo García, Willy Iturri, Héctor Starc y Marcelo Roascio, entre otros. Pero lo que más causó sensación fue el ingreso de Pappo, Vitico y Michel Peyronel de Riff vestidos como para salir a escena. Resulta que esa noche, luego de Obras, debían tocar en Tapiales y no tenían tiempo de cambiarse. Todo estaba dado para que fuera una noche increíble bajo un calor bastante extenuante. Luis Horacio Davagnino, quien en esos conciertos estuviera acreditado al show como fotógrafo, y que ahora vive en Mar del Plata, recuerda: "Antes de ir a Obras estuve en la casa de un amigo tomando algo fresco en la previa del show. La tía de éste estaba indignada y nos decía que había visto por TV a esos" degenerados de Van Halen" en un programa de chimentos y no podía entender cómo los íbamos a ir a ver. David Lee Roth, con sus calzas ajustadas, era demasiado para la pobre Vicky quien se creía que el grupo era inglés. ¡Imposible explicarle nada! (risas). Ese era el pensamiento típico de la gente de su generación".


El show comenzó con "Romeo Delight" de su tercer disco y al toque se vino "Unchained", del disco "Fair Warning". El sonido era criminal y la escena del grupo traspasó todo límite. Obras era un hervidero intenso y las paredes parecían moverse. Horacio sigue rememorando: "Al poco de iniciarse el concierto hubo bardo entre la seguridad de la banda y algunos fotógrafos. La verdad es que nosotros no estábamos acostumbrados a las restricciones de no usar flash y parece que hubo algunos que no lo tuvieron en cuenta, entre ellos el fotógrafo de una conocida revista de nuestra música en esos días. Los patovicas nos empezaron a desalojar a todos y hubo varios forcejeos más algún que otro golpe. Tuvimos que retirarnos y me vi obligado a sacar de más lejos. Aunque la calidad de luces de este evento era excelente, la realidad es que yo no tenía, en ese momento, tanta experiencia y trabajar sin un flash de apoyo o relleno como se decía en la jerga, me complicó la vida. Por eso, el material color no lo pude obtener con la mejor calidad". El show que Van Halen siguió desarrollando fue impactante. Hicieron 5 temas de su última placa "Diver Down" y las demás canciones del setlist se repartieron entre sus otros 4 álbumes. También fue importante la cantidad de temas de su primer disco (4 temas). Ya de movida se vino un solo espeluznante de batería por parte de Alex y a lo largo del show, hubo tiempo para los solos de Michael Anthony (bajo) y Eddie Van Halen (guitarra). El de Eddie fue increíble e incluyó parte de temas de "Erupcion", "Spanish Fly", "Little Guitars" y "Mean Street". Descomunal lo del "marcianito".


Como nos cuenta Ángel, fiel testigo de esas noches en Obras: "Eddie no se guardó nada en ninguno de los dos shows, no había tema en el cual no demostrará todo su virtuosismo técnico. Todos los violeros presentes en Obras se babeaban viéndole sacar chispas a la guitarra con sus tappings y armónicos o metiendo unos vibratos y sustain que no se podrán olvidar para los presentes esa noche, para los que lo vieron en vivo. Eddie cambió la técnica para todos los que vinieron luego. En Obras, no se quedó en su papel tipo "héroe de la guitarra" sino que dio un show integral impresionante junto a la banda. Su trabajo en cuanto a las armonías que usaba en los solos y en sus juegos rítmicos, y por momentos polirrítmicos, contra la batería y el bajo, me dejaron sorprendido". El setlist de 22 temas, incluidos los bises, tuvo el condimento de muchos covers. En total fueron 7 los elegidos por la banda, y que en su particular interpretación, cautivaron al público. Tal fue el caso de "Summertime Blues" (cover de Eddie Cochran), con una versión idéntica a la que hacían los The Who en vivo, "Ice Cream Man" (cover de John Brim), "Dancing In The Street" (cover de Mar in Gaye-Hunter-Stevenson), un viejo éxito de rhythm & blues, y "Oh, Pretty Woman" (cover de Roy Orbison). David Lee Roth desplegó, a lo largo del show, toda la gama de argumentos que un frontman debe tener. Fue salvajemente sexy arriba del escenario y su despliegue físico fue brutal. Saltos al por mayor, mucho feedback con la gente y una voz que mezcló cosas de Plant, Daltrey, con un toque Purple. Su look fue impecable y se lo vio muy emocionado por la respuesta del público. Incluso hasta improvisó un tema con una acústica poniéndole a la letra su agradecimiento hacia los argentinos (fue escaso su dominio del castellano).


Así se llegó al final del show con "Ain't Talkin' 'Bout Love". Faltaban sólo los bises que fueron dos covers de gran factura: "" You Really Got Me" (cover de The Kinks) y "Happy Trails" (cover de Roy Rodgers y Dave Evans). Fin de una jornada gloriosa para el Rock Pesado y el Metal. Van Halen arrasó todo a su paso y nos voló la cabeza. Realmente, para todos los que estuvieron allí, fue algo difícil de olvidar. Absolutamente todos salieron “sordos” debido al volumen brutal del concierto y por varias horas sus cerebros fueron descartables. Entusiasmados, al final de los shows, los Van Halen prometieron volver a la brevedad, cosa que después nunca se corporizó. Solo quedó ese gran recuerdo de las noches en Obras, como ese primer amor que nos marcó para siempre. Por Ricardo Puiggrós Fotos: Luis Horacio Davagnino


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