“Hoy en día, Gamma Ray depende 100% de lo que haga Helloween”
Dirk Schlächter es un músico polifacético, muy dado a la charla, quien a pesar del cansancio nos habla sin ningún tipo de problemas, no solo de Gamma Ray, sino también de su experiencia con los españoles Avalanch, así como la vez que terminaron en una protesta de maestros en Buenos Aires. Todo esto y mucho más en esta nota apasionante.
Hola Dirk, muchas gracias por tu tiempo, ¿cómo estás?
Hola, hola, todo bien, muy bien, recién volviendo de ensayar, ¿y tú?
Por acá todo OK, me imagino que debes estar algo cansado…
Un poco sí, pero no hay problema, aún tengo conciencia de lo que hago y digo (risas), dime una cosa ¿estás en Argentina verdad?
Así es, somos de Efecto Metal Revista y estamos directamente desde Buenos Aires, Argentina.
Si, eso tenía entendido OK, ¿quieres que hablemos en inglés o – (acá Dirk nos habla en español)- o prefieres que hablemos en español?
Como te sientas más cómodo…
Me es indistinto, mi esposa es mexicana y tenemos 23 años juntos, así que tengo postgrado en español (risas), ¿sabés qué?, estás en Argentina, así que hablemos en español, será más… eeeh ¿interesante? (risas)
Perfecto, comencemos entonces. Gamma Ray es hoy por hoy una de las bandas más reconocidas e icónicas del power metal a nivel mundial y su ascenso ha sido no solo vertiginoso, sino que han sabido mantenerse en la cima por décadas. ¿Cómo ha sido la evolución de la banda y su concepción musical desde sus inicios hasta el día de hoy? ¿A qué atribuyes que la banda mantenga su status de icono indiscutido del power metal a través del tiempo?
¡Uf!, bueno, a ver, mira, mmm conocí a Kai (Hansen) en 1989, eso quiere decir que tenemos más o menos 35 años juntos, aunque claro, en los últimos años ha estado más con Helloween que con Gama Ray. Pero, mientras estuvimos trabajando en los primeros discos y giras, nos fuimos amoldando a una cierta manera de componer, de encarar las canciones, de grabar e inclusive de mezclar, por lo que pudiéramos decir que terminamos desarrollando un estilo bastante definido, y, si bien es cierto que hemos ido cambiando de músicos, no existe algo digamos, especificado o programado, todo resulta espontaneo. Por ejemplo, un baterista nuevo trae su propia energía, su propia vibra y la incorpora al trabajo.Eso es algo que a mí me gusta mucho, que nuestro proceso es más bien natural y no algo artificial, algo programado, algo dictatorial, tipo “bueno ahora vas a tocar así”. Por supuesto, que cualquier agrupación siempre va a sonar o a desarrollar un tipo de sonido según los músicos que la conformen porque precisamente cada uno tiene sus “particularidades” ¿no?, aunque también hay que reconocer que hoy en día en este estilo es muy común que las cosas sean un poco diferentes.
¿Cómo diferentes, a qué te refieres?Me refiero a que, por un ejemplo, hoy en día hay muchísimas producciones discográficas en las cuales un músico al momento de grabar hace todas las guitarras, aunque la banda tenga 2 guitarristas en vivo y bueno… probablemente la batería esté programada en una maquina en lugar de ser grabada como corresponde en el estudio (odio eso la verdad) – En este momento, Dirk hace un gesto de asco y de ganas de vomitar para luego reírse- En fin creo que por eso, por no querer caer en esa especie de robotización musical es que siempre estuvimos en la búsqueda de un buen sonido, de un estilo que nos gustase. Lógicamente, con los años vas agarrando otras influencias de otros estilos, las vas incorporando y así vas desarrollándote. Adicionalmente tengo que decir que nunca nadie vino a decirnos que hacer o a ponernos limites, eso fue y ha sido importantísimo. ¿Comprendes?
Si, claro, podríamos decir que ustedes siempre han estado parados sobre una base firme y a partir de ahí van avanzando libremente a la hora de hacer las canciones, pero siempre teniendo claro sobre donde -están parados.
¡Exacto!, eso siempre ha sido así, se trabaja con mucha libertad, fíjate que, por ejemplo, digamos que alguien hace una canción y graba el demo en su casa ¿no?, antes de que la canción sea grabada de manera definitiva para el álbum la ensayamos, es decir la tocamos en el cuarto de ensayo solo con guitarras, bajo, batería y voz, es decir sin nada de teclados programados o arreglos orquestales. Bueno, supón que exista un teclado de fondo, (risas) pero el punto es que tiene que estar tocado por alguien, tiene que existir la interacción humana allí, eso es lo que hace que las energías fluyan y es ahí donde puedes darte cuenta si las cosas funcionan o no, ese es el verdadero trabajo de un equipo, de una banda, ya sabes, ideas que van y vienen, en fin, es allí donde realmente sabes si algo va a funcionar o no, es (repito) donde fluyen las energías (risas)
Te entiendo, ahora bien, ya son 3 décadas de carrera… Si, somos viejitos (risas)(risas) Bueno no quise decir eso ¿eh?, me refería a que han dejado tras de sí una buena cantidad de discos cargados de temas espectaculares, muchos de los cuales se han convertido en clásicos indiscutidos del metal. ¿Cómo hacen a la hora de armar un setlist para los shows en vivo? ¿Cuál es el criterio principal? ¿Cómo logran el balance entre lo que la gente quiere escuchar y lo que ustedes desean tocar?
Sencillo, no se logra (risas). La verdad es que siempre es muy difícil. Por un lado, tienes un cúmulo de canciones geniales que vos querés tocar, pero… a ver, ¿cómo te explico?, por ejemplo, si estás lanzando un nuevo disco es relativamente fácil, ya sabes, tienes que tocar por lo menos 4 canciones del disco nuevo, luego debes tener en cuenta e incluir los más grandes éxitos de la banda, después de eso te queda un pequeño margen como de 3 o 4 canciones donde puedes tocar cosas interesantes, cosas que la gente no espera, entonces hablamos entre nosotros y que se yo, alguien dice “oye tengo muchas ganas de tocar este tema, ¿están de acuerdo?”, entonces cada quien opina, se llega a un acuerdo y se arma el set. En el caso de una gira aniversario pues mmm… por ejemplo hubo una vez que hicimos una especie de encuesta en nuestra web, le pedimos a la gente que, de todos nuestros discos, eligiesen sus tres temas favoritos (de cada disco) y con los resultados fuimos viendo y armando lo que había que tocar ya que (lógicamente) si es una gira aniversario quieres tocar canciones de todos los discos. En otro tipo de gira, digamos que no es tan importante tocar cosas de cada disco (como lo que te decía al principio de un nuevo disco), de todas formas, armar el set nunca es sencillo (risas).
Las letras de Gamma Ray suelen explorar diversos tópicos y van desde la ciencia ficción, pasando por la fantasía épica, hasta algunos puntos de crítica social, ¿en que se basa el proceso creativo? ¿Cuál vendría siendo la fuente de inspiración que los lleva a escribir sobre tantos temas?
Bueno, es algo que suele variar mucho, depende de muchos factores, algunas veces conversamos entre nosotros y decidimos que el álbum debe ir orientado sobre un concepto o temática particular y es hacia allá que apuntan todas las letras pero otras no, simplemente queremos enfocarnos en buenas canciones y cada una de ellas te cuenta una historia diferente, ya sea (como bien dijiste) de fantasía o capaz Kai (Hansen), leyó un libro y eso lo inspiró. Otras veces es algo que pasa en el momento, ya sabes cosas más de actualidad o cosas como cuando hicimos el “Somewhere out in Space” que era bastante claro el mensaje de que no era posible que los egipcios hubiesen construido las pirámides sin ayuda externa. En fin, puede haber cosas como ¿hacia dónde vamos? o ¿de dónde venimos? (risas). Todo depende, no hay una fórmula digamos, a veces tenemos una línea central o concepto para trabajar y otras veces, no tanto.
Además de tu trabajo en Gamma Ray has participado activamente en otros proyectos como por ejemplo Neopera e inclusive los españoles Avalanch, ¿Cómo logras dividir tu tiempo para cumplir con todos estos compromisos? ¿Cómo fue la experiencia de trabajar con un clásico del metal en español como Avalanch? ¿Crees que estas experiencias impactaron de alguna forma en tu manera de sentir y componer música para Gamma Ray posteriormente?
Bueno, ah, cuando trabajas con otras personas y otros estilos musicales siempre vas luego a tener otras ideas, es algo que me gusta hacer. Si bien ahora estoy viviendo nuevamente en Alemania, la mayor parte del tiempo, pasé como ocho años de mi vida viviendo en México con mi familia y ahí estuve tocando con un montón de gente haciendo diferentes tipos de música, te hablo de rumba flamenca, pop music, disco, en fin, todo muy distinto a lo que suelo hacer ¿no? (risas).En el caso de Neopera, me contactaron y preguntaron si quería ser parte del proyecto, de hecho, fue Eike Freese que era el compañero del señor (Jörn), Schubert (risas), padre de Neopera. Habían tocado juntos en Dark Age y estaban haciendo el demo en el mismo estudio en el que yo estaba, así que me preguntaron si me gustaría participar. Me pareció interesante y grabé el demo, ahora que lo pienso creo que también los ayudé a conseguir el contrato con la disquera (risas). Después cuando fueron a grabar el disco Eike me preguntó si podíamos hacer las guitarras entre los dos, después me ofreció lo mismo con el bajo y una cosa llevó a la otra (risas), ya ves, solo buena energía. Eike es un buen tipo así que de ahí salió la colaboración (risas).
Ya veo, supongo que ahora me dirás que con Avalanch fue algo parecido ¿no?
Sabés que no (risas), con Avalanch fue muy diferente, en esa época estaban buscando un bajista para lo que sería el disco “El Secreto” (2018) y tenían a Mike Terrana (viejo amigo mío), en la batería. Mike me llama y me dice “oye estoy tocando con estos españoles y su guitarrista Alberto Rionda es un gran compositor, tienen muy buenas canciones, pero están necesitando un bajista, ¿te gustaría venir?”. Así que nada, me mandaron los demos y cuando los escuché fue como ¡wow!, me encantaron, tenían todo lo que me gustaba, era mi estilo por así decirlo, además en esa época tenia muchísimo tiempo libre porque Kai (Hansen), estaba girando con Helloween así que…
Por supuesto, ya sabias que eso iba para largo…
Al principio Kai (Hansen), me dijo que máximo le tomaría un año y bueno (risas), ya sabemos cómo salió, así que por eso comencé a trabajar con Avalanch, no solo a grabar el álbum sino a tocar en directo, recuerdo que además de Mike (en la batería), estaban Alberto Rionda y Jorge Salan en las guitarras, ambos extraordinarios músicos, muy buenos guitarristas, la verdad esa formación de la banda fue muy muy buena.Alberto (Rionda), no solo es un gran compositor, sino que su estilo es muy diferente, muy mmm…español (risas), lo cual es genial porque está lleno de otras influencias y matices, lo cual es algo que me encanta, es decir, yo tengo mi propio estilo para tocar el bajo, pero estoy siempre abierto a las sugerencias, a otras propuestas, no soy una persona de “cabeza cuadrada”, de decir “el bajo del heavy metal es así y debe sonar así” (risas). De hecho, una de las cosas que me gustó fue que Alberto (Rionda), me dio total libertad para hacer lo que yo quisiera en el bajo, al punto tal de que me mandó unas cintas con la batería y las guitarras para que yo grabase el bajo, una vez que lo hice el volvió a grabar todas las guitarras basándose en lo que yo había hecho en el bajo, eso me encantó, me pareció un lindo detalle. Esa es la razón por la cual el disco suena como si hubiésemos estado todos grabando a la vez en el estudio, pero no fue así (obviamente) sin embargo te da esa impresión por lo que te contaba recién.
Ha pasado un tiempo desde la última vez que Gamma Ray estuvo en la Argentina, (10 años aproximadamente, creo), ¿Qué opinión tienes del público argentino? ¿Alguna anécdota que puedas contarnos de algo que les haya sucedido aquí?
¡Wow!, ¿Diez años ya? (risas), anécdotas, mmm… déjame ver, no recuerdo mucho la verdad, (risas), pero a ver, no sé si fue la última vez que estuvimos allá, pero sí que llegamos un par de días antes del show así que quisimos salir y festejar un poco, ya sabes tomando toda la noche, conociendo la ciudad (risas). Llegando al final de la noche, desembocamos en una especie de plaza enorme donde había una carpa inmensa y estaban unos… unos maestros protestando por… mejores condiciones de trabajo o mejores salarios o quizá exigiendo un cambio en el sistema educativo, no recuerdo bien (risas), era algo de eso. Bueno, entramos en esa carpa y los maestros comenzaron a explicarnos todo lo que pasaba. Al final terminaron dándonos cerveza (risas), estuvimos un buen rato ahí y volvimos al hotel para dormir (risas).En cuanto al público argentino pues, es uno de los mejores, están siempre llenos de energía, de pasión y cantan sin parar, es una de las razones por la que nos encanta visitar Argentina.
Gamma Ray nos visitará el próximo 24 de abril junto a la banda Killswitch Engage, ¿podrías decirme cómo surgió la idea de una gira conjunta teniendo en cuenta la diferencia de estilos y publico entre ambas bandas?
Honestamente la idea original no era esa (risas), al menos no es lo que yo recuerdo. Originalmente la idea fue hacer un pequeño festival con Gamma Ray, Sabaton y Killswitch Engage pero al final Sabaton canceló su participación (o la oferta, no sé bien) y nos preguntaron si no teníamos problema en hacerlo con Killswitch Engage a pesar de la diferencia de estilos, como tu bien dijiste. Nosotros somos los viejitos del power metal (risas) mientras que los Killswitch hacen un metal que va más en onda con la nueva generación, de hecho, mi hijo los escuchaba y fue quien me mostró algunas canciones del primer disco de ellos.
¿En serio, conociste a Killswitch Engage por tu hijo?
Si, (risas), déjame decirte además que al menos los tres primeros discos me gustaron muchísimo, muy buena música, buenas canciones, claro todo más moderno ¿no? (risas), después les perdí la pista y no sé muy bien que estarán haciendo ahora, pero son una banda excelente, por lo cual creo que va a ser un show muy interesante, ambas agrupaciones van a hacer lo posible para ganarse a los fans de la otra banda (risas). Creo que va a estar muy bueno. Honestamente tengo mucha curiosidad por ver que va a pasar cuando estemos allí. (risas)
Hace poco Gamma Ray lanzó una serie de álbumes recopilatorios, ediciones especiales, remasterizadas, etc., todo un combo de cosas celebrando los 30 años de la agrupación, pero la pregunta que se hacen todos los fanáticos es, ¿cuándo tendremos un nuevo disco de la banda?
¡Uh!, ahm (risas), a ver, ¿cómo puedo decir esto?,ahm, bueno, la cuestión es que es difícil encontrar un momento en el que todos tengamos tiempo, y además creo que ya todos tienen más que claro que Kai (Hansen) va a quedarse con Helloween al menos un rato más, (risas). Ahora van a grabar un nuevo disco, en fin. Es más, esa es la razón por la cual nosotros podemos hacer esta gira, porque Helloween no está haciendo nada en este preciso momento, así que como te darás cuenta, toda la actividad de Gamma Ray está supeditada a lo que haga Helloween o (mejor dicho) a lo que haga Kai (Hansen) con Helloween, por lo que al final todos en la banda comenzamos a hacer otras cosas ¿comprendes?
Si, claro, te entiendo perfectamente.
Si, por ejemplo, si bien ya no estoy tocando con Avalanch (pero por razones extra musicales), durante el último año estuve tocando con Ross The Boss, de hecho, aún estoy trabajando con él, cada vez que tenga un show, y yo tenga disponibilidad, ahí estaré.Además de eso sigo buscando hacerme un nombre como bajista, (le ofrecí mis servicios Doro Pesch, entre otros artistas), así que suele pasar que aunque tengas unos meses tranquilos sin mucho trabajo, de repente te comiencen a llover ofertas de todos lados (risas). Ahora mismo tengo la gira de Gamma Ray, luego estaré con Ross The Boss, después con Avantasia en algunos festivales, en fin, estaré haciendo lo que más me gusta que es tocar el bajo en vivo (risas). No me mal entiendas, grabar un disco es genial, es como pintar un cuadro, estás ahí con cada detalle, con la producción, añadiendo capaz, jugando con los colores, etc, pero nada se compara al directo, a lo que se siente cuando estas allí en medio del clamor de la gente y la energía de la música sin importar que tipo de música sea, como ya te dije antes, puedo tocar rumba flamenca y por el solo hecho de estar en vivo con otros músicos en un escenario voy a estar feliz.
¿Cómo ves hoy en día el negocio de la musica y el funcionamiento de la industria en general con todo esto de las plataformas digitales y el streaming?
¡Horrible!, es horrible realmente, todo se fue a la mierda, (risas), no es bonito, en serio no lo es, ¿sabes?, ahora la música está ahí, libre, a la mano, y se pierde el valor, los jóvenes hoy en día no conocen, no saben ni valoran lo que cuesta hacer la música. Todo está al alcance, tienes YouTube Music, Spotify y todo eso gratis, puedes escuchar la música sin pagarla, claro te colocan algunas promociones o comerciales de productos, pero todo está libre, escuchaste todo gratuitamente ahí, en fin se pierde el valor de la música, se te hace muy difícil vivir de esto, pero bueno, en el caso de los grandes es por ahí otra cosa, pero con las bandas medianas, chicas o independientes es todo un tema porque realmente no ganan absolutamente nada con Spotify y todas esas plataformas digitales. Necesitan tener millones de reproducciones para lograr algo y aun asi es una miseria, así que de verdad te repito me parece algo horrible.
En los primeros discos de Gamma Ray estuviste tocando la guitarra y posteriormente pasaste a tocar el bajo, ¿este cambio vino por una necesidad particular de la banda o fue algo que tu solicitaste?
Fue algo que yo pedí. Si bien me gusta tocar la guitarra y me encanta el trabajo de la guitarra que hicimos en “Insanity and Genius” en el ‘93, tanto en el disco como en la gira (Dios mío, la verdad estaba muy loco en esa época), (risas), el bajo es mi instrumento natural, es mi instrumento de corazón por así decirlo, siempre me voy a sentir más feliz con el bajo que con la guitarra (risas). Es más, cuando conocí a Kai (Hansen) en la Universidad de Musica de Hamburgo (Alemania), ya yo era bajista (risas). Sin embargo, cuando se hizo el álbum “Heading for Tomorrow”, lo que estaba planeado es que el bajista (Uwe Wessel) solamente hiciese la grabación y no participase en la gira, pero después resultó que sí, no solo para hacer la gira sino para formar parte oficialmente de la banda y, si bien Kai (Hansen), originalmente quería que Gamma Ray tuviese solo una guitarra, grabó tantas melodías distintas y “overdubs” que era literalmente imposible reproducirlo en directo. Entonces dado que el bajista quería quedarse y como yo sabía tocar la guitarra (tomé clases de guitarra clásica en mi adolescencia), tuve que aprenderme todos los temas de “Heading for Tomorrow” en la guitarra, practiqué un montón y bueno si bien a los 19 tocaba el bajo me tocó volver a la guitarra a los 24 o 25 (risas). Para serte honesto, al cabo de un tiempo comencé a sentirme incomodo, como si fuese una especie de maquina ¿comprendes?, además de la guitarra tocaba los teclados en vivo, en fin, no lo estaba disfrutando, la verdad, y cuando por fin pude grabar algo con el bajo fue como una especie de “ahhhhhhhhh”, un alivio enorme, así que de un momento al otro cuando terminamos la gira de “Land of the Free” le dije a Kai que quería tocar el bajo como había sido planificado en un principio (risas).
Dirk ¡muchisimas gracias por tu tiempo y disposición!, sé muy bien que vienes de una jornada de ensayo bastante larga así que ya para despedirnos te pido algunas palabras finales y un saludo para todos los lectores de Efecto Metal Revista.
Muchas gracias a ti, la verdad me divertí mucho y bueno un gran saludo a todos en la revista Efecto Metal, espero verlos en Buenos Aires, Argentina, el próximo 24 de abril, con Gamma Ray y Killswitch Engage.
Por Joad Manuel Jiménez
