Aproximadamente a las 23 horas comenzó la noche con Última Guerra Mundial (UGM), primera banda soporte. Hicieron un muy buen show y calentaron el escenario para el arribo de Crytical, quienes también hicieron lo suyo y estuvieron a la altura de las circunstancias.
Cerca de la 1:30 se vino lo que toda la gente estaba esperando: CTM. Abrieron la noche con “Reunidos” y se comenzó a desplegar la magia que irradiaba la banda con el talento y humildad que el Tano nos tiene acostumbrados. La gente se encendió al toque con este tema nuevo que vino acompañado de un sonido poderoso y muy nítido. De movida se podía percibir que sería una noche espectacular.
El show continuó con “Soy Un Luchador”, “Manos Invisibles”, otro tema nuevo, y “Voy A Mi Destino”. El setlist contó con 22 temas que repasaron la mayoría de los trabajos del Tano solista y algunos clásicos de Almafuerte. Fue realmente una noche plasmada de sensaciones encontradas y emociones muy grandes y hermosas. Más allá del estreno del disco, la gente se comportó muy bien y disfrutó del gran recital que brindó la banda. “La Camorra” desplegó una bandera con dedicatoria para Giuliano Noé, guitarrista del grupo, y reciente incorporación, demostrándole su afecto y aguante en una noche muy particular para él. Fueron momentos muy emocionantes.
En realidad, no me alcanzaría la vida para describir lo que significa este trabajo de CTM, porque siempre hay sorpresas, y porque aparte, deja plasmado las grandes personas que son los miembros de la banda, tanto arriba como abajo del escenario. Gracias, gracias, infinitamente gracias por tanto, y por escribir su propia historia rodeada de música y amigos.
“Crudamente” es un trabajo realizado con mucho esfuerzo y maravilloso. Cada miembro del grupo se destaca en lo que se refiere a su instrumento y todos conforman, junto al Tano Marciello, una banda muy compacta.
La noche culminó bien arriba y todos nos fuimos con el alma llena de música.